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Aries II - Semana III
- Nacidos entre el 3 y 10 de Abril-

Aries

Período denominado La Semana de la Estrella. Este período puede compararse con la época humana en que el niño emerge del círculo protegido de la primera infancia, toma conciencia del mundo que le rodea y comienza a sentirse el centro de él.

Aspectos positivos:

Emprendedor, dinámico y valiente.

Aspectos negativos:

Distante, irritable y dado a los excesos.

Ante todo, deseas ser el centro de atención. A menudo te sientes solo, incluso en medio de una multitud, evitando en consecuencia el quedarte a solas.

Como representante nacido en la Semana de la Estrella, necesitas, metafóricamente hablando, satélites a tu alrededor: admiradores, seguidores, compañeros de trabajo, etc.

Aunque luchas por impedir que tu posición se vea comprometida o amenazada, eres capaz de ceder protagonismo y consagrarte de lleno a una causa o proyecto de cualquier índole.

Sin embargo, puedes dejarte arrastrar por la vanidad, disgustando a los que te rodean.

Eres propenso a "enamorarte" de tus propios proyectos e ideas, y quizás de ti mismo.

Te empeñas en alcanzar tus metas, aunque para ello tengas que emplear métodos poco éticos o hacer caso omiso de los sentimientos de los demás.

Tus luchas mundanas pueden desviarte de lo que debería ser tu principal atención: tu "Yo" interior. La falta de introspección y conocimiento de ti mismo, se convierte en un obstáculo para tu desarrollo espiritual.

No obstante, en el momento en que comprendes la importancia de tu propia persona pasa a representar la experiencia más importante en la vida.

Pocos son capaces de igualar tu espíritu luchador y competitivo. La ventaja que tienes con esta poderosa energía que te permite poner en práctica tus ideales, te hacen valiente y visionario.

Por este motivo muestras cierta impaciencia con las personas física y mental más lentas que tu, creando situaciones en que tu ira escondida salga a flote.

Te sientes especialmente a gusto cuando estás rodeado de personas que trabajan a tu lado y saben compartir tus penas y alegrías.

Sueles hacerte indispensable, pues te hace sentir bien el saber que los demás te necesitan.

Aunque en el fondo deseas una absoluta libertad para realizar todo aquello que anhelas sin sentirte en ningún momento, atado por responsabilidades sociales o familiares.

CONSEJOS

Evita agobiar a la gente con tu energía.

Actúa con responsabilidad.

Procura controlar tu necesidad de atención y no manipules a los demás.

Reconoce tus valores interiores y desarrolla tus capacidades potenciales.

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